sábado, 3 de septiembre de 2011

¡Ya se acabó el verano!

¡Hola de nuevo!
Parece que la vuelta al "cole" nos llega a todos... Para mi son días de mucho trabajo, mi primera actuación es el 27 de Septiembre en Valencia. No suelo tener la suerte de cantar en mi ciudad ni de cantar zarzuela , asi que estoy tremendamente ilusionada con el concierto y me estoy preparando con una energía inagotable.
Y  ¿cómo me preparo despues de las vacaciones? Bueno , depende de cada año. Hay veces que no paro de trabajar en todo el verano y las vacaciones brillan por su ausencia , asi que en esos casos conviene descansar. Pero este año he podido relajarme , visitar a la familia y estudiar un poco para no perder la forma . Asi que lo primero es revisar la dieta . Cuando era jovencilla comía porque había que comer , no era algo que me interesara mucho . Después de casarme las cosas han ido cambiando y ahora me gusta comer . Asi que en verano los helados van y vienen , el all i oli me encanta , devoro ciruelas ... vaya que me dejo ir un poco. Asi que la primera parte de la vuelta al trabajo consiste en volver a una dieta equilibrada donde haya hidratos de carbono, verduras y frutas y proteínas. Todo en su justa medida. Me olvido de los fritos , los sobaos , los helados...
Después viene el ejercicio . Desde que tuve los primeros problemas de espalda , el Dr. Kovacs primero y el traumatólogo canario Dr. Medina después , me recomendaron muscular la espalda , cuadriceps y lumbares. La musculatura del canto es potente y en mi caso había un desequilibrio con la intervertebral , que estaba menos desarrollada. De ahí los dolores que me obligaron a cancelar algunas funciones hace algunos años. Ambos me recomendaron nadar , por ser el ejercicio que menos impacto tiene sobre la espalda y mas músculos mueve a la vez.  Yo nadaba como casi todo el mundo... para defenderme...un ratito. Vaya , que si dependía de mis conocimientos natatorios para salvar la vida , como que no. Mi marido fué nadador profesional y me enseñó a nadar bien. Todos mis cuñados han sido nadadores y me dicen que tengo un estilillo bastante bonito. ¡Estoy super-orgullosa de haber aprendido!
Como cada vez que aprendo algo , me metí a fondo para hacerlo lo mejor posible a pesar de que recuerdo que mis primeros 25 metros a crawl fueron todo un reto. ¡Llegué al otro lado de la piscina echando los pulmones por la boca!
Aprendí a nadar cumplidos los 30. Y no me da vergüenza , he hecho muchas cosas muy normales como comerse un perrito caliente por primera vez , tambien después de los 30. (El señor del puesto de perritos no se lo podía creer) Tambien tuve la varicela después de los 30... por culpa de eso llegué tarde a los ensayos de Rigoletto del Teatro Real. Pero eso es ya otra historia.....
Asi que si dispongo de piscina en las cercanías , me pongo a nadar. Combinado con una buena tanda de abdominales (importantísimo para el canto) ponen en forma estupendamente.
Y luego , evidentemente , toca ponerse a cantar. En la soledad de mi estudio y después también con mi pianista. A esto hay que añadir el estudio de la música "nueva". Desde que empecé hace 24 años no he conocido un verano en el que no tuviera que estudiar algo nuevo. A veces ese algo ha sido "un mucho" , pues he llegado a debutar hasta 5 roles en una misma temporada.
¡Asi que en eso estoy ahora!  Hoy a las 11 ya estaba cantando mis romanzas de zarzuela, y pegandole un repasito a la Norina del Don Pasquale , mi siguiente compromiso despues de Valencia.
Un saludo a tod@s y hasta otro ratito! 

¡Bienvenid@s! ¿Y por que un blog?


¡Hola! Esta es la primera vez que escribo un blog y estoy bastante despistadilla, espero poder ponerme al día rápidamente y que resulte bonito, instructivo y divertido a la vez.
¿Por qué un blog? Bueno, siempre me ha gustado escribir, pero sobretodo mi idea es llevar a la mayor cantidad de gente posible la realidad de un cantante de ópera: como vivimos, cuánto y cuando estudiamos y que significan las restricciones que ponemos a nuestra vida para poder actuar al 100% .
Por otro lado, soy muy activa, asi que también me propongo hablaros de las cosas que me gustan, de mi pasión por las manualidades, del buceo y de otras muchas cosas.
Quisiera luchar contra la imagen de extraterrestres que tenemos los que nos dedicamos a la música clásica y al mismo tiempo reivindicar la figura del cantante de ópera, que es algo más que un cuerpo que canta. Tenemos sentimientos, pasamos miedo, nos cansamos, enfermamos, nos gusta vivir y socializar, divertirnos.... tenemos derecho a ello, como todo el mundo, aunque nunca podamos olvidar que nuestro instrumento, el que nos hace disfrutar y nos da de comer, está con nosotros en TODAS las circunstancias de la vida. La alegría nos afecta, la tristeza también, la desilusión, la traición, el amor, cualquier emoción grande puede alterar el sonido que producimos al hablar, asi que imaginad cómo afecta a la voz cantada. En fin: que no somos robots que estamos siempre igual (con suerte, perfectos) en todas las representaciones.
¿Que ser humano es asi de invariable?
¡Gracias por pasar un ratito conmigo!